porque acaban la faena,
me gusta ir cada tarde
a una vieja taberna
que es sede de pescadores
y huele a sal marinera.
Me siento siempre en la esquina
junto a la ventana abierta,
donde la brisa del mar
por la ventana penetra
y se observa el horizonte
y alguna barca de pesca.
Los pescadores, cansados,
con sus botas de faena,
toman su vaso de vino
con su mirada serena
fijada siempre en la mar
y en las nubes que se acercan.
Yo les contemplo a diario
desgranando mis poemas;
poemas de remo y caña,
de red y de barca vieja;
de tormenta, mar adentro,
de olas de sal y de arena.
Con su gorra y con su pipa
y el peleón que sostienen,
esos viejos pescadores
con su mirada perdida
escuchan crujir el casco
que las olas acarician.
Desde mi esquina sombría,
junto a la ventana abierta,
cada tarde con mis versos
mi inspiración va de pesca;
que son versos pescadores
entre sueños de taberna.
Taberna de pescadores
que con su mirada ausente,
se adivina en su retina
el más allá de sus mentes.
Taberna de pescadores:
norte y sur, este y oeste».
Francisco Barbachano
El Casinet
https://valenciaextra.com/casinet-cabanyal/
No hay comentarios:
Publicar un comentario