«El 16 de marzo amaneció radiante previniendo la primavera, era lo que se solía decir: un autentico día fallero. Sara se había levantado pronto, mucho antes de que iniciaran el día con la despertá, despertando como su nombre indicaba, a todos los valencianos en un nuevo día, a base de sembrar las calles con miles de petardos».
Las doce llaves
No hay comentarios:
Publicar un comentario